
Suavemente como lo hace
El rocío primaveral
Poco a poco te introdujiste
Hasta la raíz misma de mi ser
Lograste que te amara
Con cada célula de mi cuerpo
Con cada partícula de alma
Que sintiera tu alma
En todo lo que soy
Entrelazaste tus raíces en las mías
Conformando un abrazo perene
Como si se tratara de un solo ser
Me perfumaste con tu esencia
Yo desprendía tu aroma
En todo momento estabas en mí
Y yo siempre estaba en ti.
Me cuidaste con la suavidad
Que toca un pétalo del rosal
Y cuando ya era toda tuya
Sin existir un lugar sin ti
Vino el jardinero a sacar
Del jardín de mi vida
El árbol plantado junto a mí
Lacerando las raíces de mí ser
Al sacar sin compasión alguna
Las tuyas que estaban
Encarnadas en las mías
Aun me pregunto si para ti
Valió la pena el dolor del crujir
De las ramas y raíces rotas
Al separar al ser, que en mi vida
Se había convertido en mí.
1 comentario:
Que dedicación.
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